¿QUIÉN ES NAYRA?

NAYRA fue creada en Mayo de 1995 como Agencia de Viajes en la ciudad de La Paz, capital administrativa de Bolivia. Nuestra principal actividad es el Turismo Receptivo Privado, siendo reconocidos en nuestro medio por nuestros servicios personalizados y profesionales.

Nuestra empresa está debidamente registrada en el Registro de Comercio de Bolivia, cuenta con un NIT (número de identificación tributaria) y tiene todas las licencias necesarias para su funcionamiento.

Nosotros te proponemos:

Viajes organizados de inmersión en la naturaleza y en la cultura por todo el territorio boliviano.

Buscamos alejarnos de las ciudades, hacer una pausa en la rutina y encontrar un espacio de paz para renovarnos. La mejor manera de hacerlo es un viaje, y el mejor destino: la naturaleza, fuente de la energía más benigna.

No nos alejamos de lo cultural, pues en Bolivia habitaron culturas prehispánicas que estaban profundamente conectadas con su entorno natural y con el universo. Aprender sobre el estilo de vida de estas civilizaciones nos abre la mente hacia una forma de vivir en donde el humano y la naturaleza son uno solo.

Nuestra misión es:

Ofrecer una experiencia transformadora, renovadora y que transmita paz a los viajeros. Nuestro objetivo es que las personas recuerden que no hay nada más increíble que la vida misma en su estado natural.

Queremos personas que aparten sus ojos de todo lo que es material y superficial, para abrirlos ante el azul del cielo y el verde de la vegetación, porque ahí se encuentra la esencia de la existencia. De esta manera se elevan los espíritus hacia el camino del amor y bienestar, con la tierra y con uno mismo.

Descubre un mundo de posibilidades mientras

Lo que observas llega al corazón

NAYRA significa en el idioma quechua “la de ojos grandes” y en aymara significa “ojo”.

Los ojos son ventanas gracias a las cuales podemos percibir la realidad que nos rodea. No hay nada más purificador y relajante que dejar de mirar una pantalla o la atiborrada ciudad para convertirse en observador de la vida en su estado más puro.